El año pasado comencé, junto con un grupo de extraños, lo que hoy puedo decir que fue toda una aventura.
Hoy tengo la fortuna de poder llamar a ese grupo: amigos. Juntos comenzamos lo que sería un año lleno de mucho aprendizaje, decenas de libros (literal jaja) y horas y horas de trabajo, en ocasiones demandante y complejo, pero siempre disfrutable.
Por estas fechas del año pasado iniciaba mi Maestría en Liderazgo Positivo, y la última clase fue en diciembre, faltan algunos pasos, como la entrega formal del proyecto integrador; sin embargo, en esa última sesión de la maestría tuvimos la oportunidad de compartir los proyectos con nuestros compañeros, y lo que vi realmente me animó. Durante el año, nos fuimos conociendo y estrechando relaciones, compartimos más que solo “clases” para convertirnos en un grupo muy unido. Un grupo, que por los proyectos que vi, la pasión con la que se expusieron y los objetivos que se plantearon, es un grupo de soñadores.
Pero de soñadores activos, no del tipo de soñador que discurre fantásticamente sin tomar la realidad en cuenta, sino el que asume la responsabilidad de construir sus sueños, que se levanta todas las mañanas y lucha por mejorar. Como persona, como profesional, como amigo, familiar y ciudadano, un soñador que busca impactar al mundo de manera positiva y que se esfuerza en su quehacer diario para lograrlo.
Este año ¿qué quieres lograr?, ¿qué te anima?, ¿por qué te levantas cada mañana y decides dar lo mejor de ti mismo? Te invito a iniciar este año con un sueño, un sueño que vivas todos los días a través de tus acciones, un sueño que construyas a diario, que te emocione, que te llene tanto que cuando veas una barrera para lograrlo, en lugar de desanimarte pienses: ¡atravesaré, brincaré o le daré la vuelta a cualquier obstáculo! ¡Yo construyo mi sueño!
Estoy seguro que en el camino encontrarás, como yo encontré en la maestría, amigos que comparten tu sueño, que te apoyan en el viaje, te auxilian cuando lo necesitas, que te echan porras, te enseñan nuevas formas de hacer las cosas y comparten contigo la alegría de saberte cada vez más cerca.
Te deseo un excelente año, la mejor de las suertes y que puedas transformar tus sueños en acciones.